El golpe de calor es una de las condiciones más peligrosas durante el verano en Chile, especialmente en áreas con altas temperaturas. Este fenómeno ocurre cuando el cuerpo se ve incapaz de regular su temperatura interna debido a la exposición excesiva al calor, lo que puede poner en peligro la salud. Reconocer los síntomas y tomar medidas preventivas es clave para evitarlo.
Es crucial mantenerse en un lugar fresco y bien ventilado. Evitar salir durante las horas de mayor calor (de 10 a 16 horas) es uno de los consejos más efectivos. Si es necesario estar al aire libre, usa ropa ligera, de colores claros y de materiales que permitan la transpiración, como el algodón. Además, el uso de sombreros y gafas de sol puede ayudar a reducir el impacto del sol directo.
Asegúrate de beber líquidos constantemente, no solo agua, sino también bebidas ricas en electrolitos, que ayudan a mantener el equilibrio de sales en el cuerpo. Los signos de un golpe de calor incluyen mareos, calambres musculares, piel roja y caliente, así como dificultad para respirar.
Si experimentas cualquiera de estos síntomas, es fundamental buscar sombra y enfriar al afectado con agua fría, además de consumir líquidos poco a poco. Consultar a un médico es siempre recomendado en caso de sospecha de golpe de calor.